Conahcyt, ¿Sin becas al extranjero?

CIUDAD DE MÉXICO (apro).-Ni duda cabe que el nuevo Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt) ha dado un giro sustantivo en sus prioridades, agendas y definición de grandes problemas nacionales en relación con lo que se había hecho por mucho tiempo atrás en el antiguo Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conahcyt). ¿Es eso bueno o malo? Depende de la perspectiva desde la que se vean las cosas. De ese tema, ya he dedicado algunos puntos de vista en otra oportunidad. (https://www.proceso.com.mx/opinion/2023/5/10/del-conacyt-al-conahcyt-definiciones-306773.html). Hoy, sin embargo, ha trascendido una noticia que por sí misma resultaría muy grave si fuera veraz: Se ha afirmado que se ha eliminado el 95% de las becas al extranjero. Dicho así, sin duda, que nadie en su sano juicio podría estar de acuerdo, de ahí que sea oportuno hilvanar algunas reflexiones sobre esta afirmación. Veamos.

Primero. Hay, en efecto, muchas disciplinas donde la formación en el extranjero es necesaria para reducir las asimetrías entre el desarrollo que existe, especialmente en las ciencias y las tecnologías, en México que lo que sucede en los países avanzados. Nadie podría decir que no es así. Lo que ha pasado en el Conahcyt, en realidad, es un replanteamiento de qué áreas deben priorizarse para estudiar en el extranjero y qué otras se pueden llevar a cabo en el país. En el primer caso, la política pública del Conahcyt ha descansado en lo que se denominan los Programas Nacionales Estratégicos (Pronaces), como criterio orientativo no como una camisa de fuerza, por supuesto. ¿Son los Pronaces la mejor solución y la única vía posible para atender los grandes problemas nacionales? No necesariamente. En la definición de prioridades juega un papel de importancia capital el modelo de país que se ha concebido por las autoridades de Conahcyt, en donde han ponderado que el interés social debe estar por encima del interés personal, para efectos de que el erario o presupuesto público destine recursos económicos. Sin duda admito que otra opción política distinta a la gobernante tendrá otros argumentos en favor de potenciar la individualidad sobre lo colectivo, como también sucede en otros países.

Hackeo de cuentas en redes sociales ¿Cómo protegerse?

CIUDAD DE MÉXICO (apro).–Hoy Internet es tan importante y necesario como lo fue en su momento el teléfono. Para algunos que me leen y que nacieron en los años 1960s recordarán lo complicado que era de hacerse de una línea telefónica. La empresa que daba el servicio era TelMex, que era del Estado, y que estaba francamente limitada. Podían pasar meses hasta que la compañía telefónica mandaba un técnico y nos daba la ansiada línea residencial. Hoy, evidentemente, las cosas cambiaron y pedir una línea de teléfonos es cosa que se resuelve en un par de días en el peor de los casos. Más aún, Internet se basa en la conexión e infraestructura de las líneas telefónicas, que nos enlazan a todo el planeta. Quizás no lo vemos, pero Internet es la consecuencia de muchos años de trabajo en telecomunicaciones por parte de muchas empresas. Hoy vivimos una época increíble en ese sentido.

Curioso es que hoy la mayoría de las personas en el mundo civilizado tienen un teléfono celular. La mayoría de ellos, sino es que todos, ya tienen acceso a Internet vía las redes 4G y 5G. Y esto es apenas una parte de la conexión que las personas hacen cotidianamente para conectarse a Internet, por ejemplo, las redes sociales.

Proceso: el canon heredado

Ciudad de México (Proceso).– Proceso no es una consigna, ni el cabezal de una revista, tampoco una leyenda extraviada, mucho menos un capítulo cerrado. Proceso es, sobre todas las cosas, un conjunto de voces que se han acompañado en el tiempo en forma de bucle.

La novela Los Periodistas de Vicente Leñero abre en su primera página con la voz de un canon compartido:

Juego sucio, renuncias y licencias

Ciudad de México (Proceso).– Marcelo, como buen jugador, se ha adelantado a sus competidores, reales o ficticios. Presentó su renuncia definitiva al cargo de secretario de Relaciones Exteriores el lunes 12 de junio en curso. Ya le fue aceptada. Sabiendo que su permanencia en el cargo no dependía de él, no hizo la promesa de desempeñarlo los cinco años 10 meses que duraría el “sexenio.”

Marcelo sabe que AMLO y Morena están jugando en favor de Claudia y que lo hacen con dados cargados. Que las encuestas, las precampañas y la consulta a la ciudadanía son una farsa para legitimar el destape de la “corcholata” preferida.

El poder político

Poder formal y poder real son conceptos afines. El formal lo determinan las leyes; el real, los hechos. En el fondo, aunque diferentes, son complementarios. AMLO y su partido oficial aspiran a lograr el monopolio del poder real. Han encontrado resistencia a su acción. La fortaleza del sistema jurídico, el Poder Judicial de la Federación, algunas instituciones autónomas y una clase media informada lo han impedido. Las leyes han limitado su acción.

Tratándose del poder, ninguna cuota, por excesiva que sea, es capaz de satisfacer a quienes lo detentan. Por un atavismo irrefrenable, siempre procurarán incrementarla. Para el caso no importa que sea a través de medios lícitos o ilícitos; aceptables o reprobables.

Espionaje militar: López Obrador sabe que sí sabe

Andrés Manuel López Obrador no sabe si Alejandro Encinas fue espiado. Miente. Niega también que la Secretaría de la Defensa Nacional esté detrás del espionaje. Miente otra vez. Afirma que es irrelevante la evidencia que confirmaría la infección del programa Pegasus sobre el dispositivo del subsecretario de Derechos Humanos. Una vez más falta a la verdad.

El análisis del Citizen Lab de la Universidad de Toronto confirmó esta información en marzo de este año. No existe en el mundo una instancia con mejor reputación y rigor a la hora de diagnosticar una infección con esa tecnología desarrollada en Israel.

Estados Unidos y México, hostil sintonía contra migrantes

Ciudad de México (Proceso).-– Los últimos días han sido especialmente complejos y severos para migrantes y solicitantes de refugio en tránsito por México y para los propios mexicanos.

La finalización en la aplicación del conocido Título 42 por las autoridades migratorias de Estados Unidos, que permitió la expulsión inmediata de quienes arribaran a su frontera usando el argumento de la pandemia, generó todo tipo de especulaciones y, sobre todo, justificó la implementación de fortalecidas iniciativas de control sobre la movilidad irregular que han resultado gravosas y violatorias de derechos. Si bien se abrieron alternativas para el ingreso regular a Estados Unidos, importantes sin duda, al final el resultado tiene por objetivo más la exclusión y menos la protección.

El vértigo del poder

                                                                                                                               Para Conchita Nava, en la memoria del corazón

Ciudad de México (Proceso).– “El mayor afrodisiaco –decía Henry Kissinger– es el poder”. Provoca una sensación de posesión absoluta que es casi imposible no desearlo. Jean-Baptiste Clamence, el juez-penitente de La caída, lo resume con la precisión de la ironía: “Mandar es respirar. Incluso los más desheredados llegan a hacerlo. El último en la escala social tiene un cónyuge, unos hijos. Si se es soltero, un perro. Lo esencial, en definitiva, es poder enojarse sin que el otro tenga derecho a replicar: ‘No se contesta a su padre’. Ya conoce la fórmula […] Es necesario que alguien diga la última palabra. Si no, a toda razón se opondría otra; sería el cuento de nunca acabar. El poder, por el contrario, zanja todo”.