Su guion de “Tierra y Libertad”: José Revueltas, el cine en el cine

Pasaron diez años para que Revueltas, la película, pudiera concluirse. Resultado de una serie de esfuerzos de los hacedores de cine en Querétaro por situar éste a nivel nacional, el filme de Antonio Jiménez hurga en la producción del escritor de Los muros del agua y luchador social relativa a su tarea en la factura de guiones. Egresado de filosofía, el director, adentrado en la obra de Revueltas, quiso rescatar uno de ellos, “Tierra y Libertad”, sobre la odisea de Emiliano Zapata. Y con su amplio equipo armó la historia de cómo podría haberse filmado. Jiménez cuenta el intrincado proceso para poder estrenarla.

Con base en el guion Tierra y Libertad (Ediciones Era, 1981) de José Revueltas, cuya esencia es la lucha de Emiliano Zapata, artistas de Querétaro filmaron Revueltas, la película, estrenada apenas como estelar de la Semana del Cine Queretano, con miras de llegar a la Cineteca Nacional.

El asesinato de Colosio, la serie

 

CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- La primera escena, con música de suspenso al fondo, es una toma aérea de la camioneta negra en la que viajaba Colosio cuando entró en la colonia Lomas Taurinas, Tijuana, el 23 de marzo de 1994. La gente grita: “¡Colosio, Colosio!…” y el candidato presidencial del PRI levanta las manos para saludar. En lo alto de una -colina dos policías judiciales del municipio están alerta. Después, en un fragmento de video real, Colosio afirma en el mitin que no le teme a la competencia política, que rechaza la incompetencia política.

Ajuste de cuentas

CIUDAD DE MÉXICO (proceso).­– En el trigésimo aniversario de Proceso, Julio Scherer publicó un emotivo recuento del origen e historia de este semanario, nacido luego del brutal golpe que desde la Presidencia asestó Luis Echeverría al periódico Excélsior. Y a pesar de ese recuerdo ingrato, el fundador de la revista dejó ver en dicho texto –que se reproduce en parte a continuación– la bonhomía que lo caracterizaba: lejos de insultar o difamar al expresidente, escribió que en todos los trabajos periodísticos de Proceso no le llegaba “el olor de la calumnia o su hermana menor, la difamación”.

Los aficionados al box sabemos que no hay golpe como el gancho al hígado. La violencia de su impacto trastorna el cerebro y descompone el cuerpo de la víctima. Sus piernas se aflojan y la guardia se viene abajo. Queda listo el espectáculo para la cuenta fatídica, los diez segundos.

En su historial, traiciones y matanzas

CIUDAD DE MÉXICO (proceso).­­– En el año 2000 el viejo régimen del PRI estaba por caer, pero Luis Echeverría Álvarez seguía vigente. Hacía un cuarto de siglo que había dejado la Presidencia, pero aún recibía en su residencia de San Jerónimo a personajes políticos, en una práctica que incomodó a quienes lo sucedieron en Los Pinos.

José López Portillo y Miguel de la Madrid tuvieron que actuar para detener el protagonismo del expresidente, quien desde que salió de Los Pinos rompió una de las reglas del sistema: el silencio de los exmandatarios.

Echeverría, reo solitario en su propia casa de San Jerónimo

CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- El expresidente Luis Echeverría, quien fuera todopoderoso en el régimen del partido de Estado, envejeció en su casa, cercado por las acusaciones de perpetrar la matanza de Tlatelolco en 1968 y orquestar el Halconazo de 1971, de las que fue exonerado “por falta de pruebas”. Hasta allá lo alcanzó una intriga, pero no de opositores o de víctimas del poder represivo que una vez encabezó; fueron sus propios hijos los que tomaron el control de su residencia, expulsaron a su personal de confianza y le quitaron la autonomía sobre su dinero. Todo se sabe por las revelaciones a Proceso de quien fue su asistente personal, María Modesta Gil Cedillo.

Luis Echeverría Álvarez, el hombre fuerte que estuvo en el epicentro del régimen que masacró a cientos de estudiantes en 1968 y 1971, vive el exilio interior. Sin bienes ya a su nombre, con menguados recursos propios y despojado de querencias personales, vive confinado, casi en el abandono, en un rincón de lo que fue su residencia en San Jerónimo.

El movimiento estudiantil en tiempo real “A 50 del 68: la historia que nos une”

CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- A las 7:30 horas del 30 de julio de 1968 el general José Hernández Toledo, comandante del Primer Batallón de Fusileros y Paracaidistas, comparte en redes sociales algunos fragmentos del parte militar en el que informa a sus superiores sobre el “desalojo” de los estudiantes que se habían apoderado de los edificios de las preparatorias 1, 2 y 3 y de varias calles adyacentes, en el centro de la Ciudad de México.

“Un grupo aproximado de 300 a 400 estudiantes se parapetaron en la preparatoria número 1, negándose a salir y recibiendo al personal de Paracaidistas y Policía Militar a balazos, bombas molotov, tabicazos, así como numerosos detonadores que usan las bombas de aviación de manufactura americana”, postea el general en referencia al operativo que sus hombres realizaron durante esa madrugada.

En deuda con Marx

Rodolfo Palma Rojo

CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- Hace 200 años que nació, en la entonces Prusia (5 de mayo de 1818), uno de los pensadores más influyentes en la historia contemporánea. Su concepción de la realidad, sus tesis políticas, su análisis social, hoy, enfrentan una revalorización luego de que, tras la caída de la URSS, se pensaran superadas. Este trabajo entregado a Proceso es una relectura de las categorías marxistas, a través de un libro fundamental sobre el tema: La fábrica del hombre endeudado. Ensayo sobre la condición neoliberal, del filósofo italiano Maurizio Lazzarato. Rodolfo Palma, ensayista, narrador y dramaturgo mexicano, sintetiza: El poder de la economía no se halla en el comercio, ni siquiera en la producción, sino en las finanzas, y es un poder sobre todo político.

La Carta Magna, instrumento del poder

CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- Una Constitución burlada, utilizada para mantener el control político, inaplicable en la división de poderes y sin garantías para hacer realidad los derechos previstos en ella es lo que uno de los principales constitucionalistas de México, Elisur Arteaga Nava, dice del documento que desde hace 100 años rige la vida del país.

Considerado como la máxima autoridad en la Constitución mexicana y autor del Tratado constitucional, publicado en cuatro tomos por la Universidad de Oxford en 1999, Arteaga Nava asegura que la llamada Carta Magna se ha convertido en un instrumento de “engaño y sometimiento”, con grupos de poder, como el Ejército y la Iglesia católica, o poderes formales, como los de los gobernadores, que actúan por encima de ella.

El día de la dignidad

Cuauhtémoc Cárdenas / CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- Los últimos minutos del 18 de marzo de 1938 el presidente Lázaro Cárdenas emitió un mensaje radiofónico: México expropiaba su riqueza petrolera. Esa jornada fue la más digna que haya protagonizado la Presidencia como institución.

Ahora, en un contexto que guarda ciertas similitudes con aquél, aparece el libro “Cárdenas por Cárdenas”, escrito por el hijo del mandatario michoacano, Cuauhtémoc Cárdenas, otro referente de la izquierda nacional. En su obra, el ingeniero y excandidato presidencial va más allá y retoma los orígenes, el contexto y las acciones concretas que permiten entender el gobierno de su padre. Con permiso de la editorial Debate, aquí se reproduce un fragmento de la obra, que ya está en circulación: