Veracruz es “un fosario”, acusa Alejandro Solalinde

VERACRUZ, Ver. (apro).-“A un hijo muerto se le tiene que dejar ir, pero a un hijo desaparecido se le tiene que hacer volver”, espetó Aracely Salcedo –quien busca a su hija Rubí Salcedo Jiménez desde el 2012– al gobernador Miguel Ángel Yunes, quien también fue increpado una decena de veces por representantes de varios colectivos de desaparecidos.

Reunión inédita en la explanada de la parroquia de Nuestra Señora de la Merced en una colonia popular de Veracruz, entre un centenar de familiares de desaparecidos –la mayoría de ellas madres— y el activista en derechos humanos y líder de la Pastoral de Movilidad Humana, Alejandro Solalinde, y el gobernador Yunes Linares.



Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí