CIUDAD DE MÉXICO (apro).-En un nuevo capítulo de tensiones bilaterales que se remontan a la salida y detención en 2022 del entonces presidente peruano Pedro Castillo, el Gobierno de México lamentó y rechazó este lunes la decisión “unilateral” del gobierno del país sudamericano de romper relaciones diplomáticas, motivada por el otorgamiento de asilo político a la exprimera ministra peruana Betssy Chávez Chino.
La medida, anunciada por el canciller peruano Hugo de Zela, ha escalado la fricción entre ambos países, afectando lazos históricos de amistad en un contexto regional marcado por debates sobre persecución política y soberanía.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí