TUXTLA GUTIÉRREZ, Chiapas (apro).- En un llamado urgente a construir la paz con justicia y dignidad, la Parroquia San Pedro y San Pablo de Chicomuselo, perteneciente a la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, denunció la grave crisis de violencia que enfrenta Chiapas y alertó sobre el silencio institucional ante los desplazamientos forzados, asesinatos, amenazas y el control territorial de grupos criminales.
A través del pronunciamiento “Para que la justicia y la paz se abracen”, que retoma el espíritu de la histórica carta pastoral de monseñor Samuel Ruiz García de 1996, el pueblo creyente expresó su preocupación por la normalización de la violencia y el contraste entre el discurso oficial de pacificación y la realidad que viven las comunidades, particularmente en la región fronteriza.
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