CIUDAD DE MÉXICO (apro).- México está preparado para las deportaciones masivas de migrantes mexicanos desde Estados Unidos: primero, con la suficiente información de que “no son criminales”; segundo, con apoyo necesario en los consulados; y, tercero, en caso de no tener alternativa y llegar a su país de origen, “que no se sientan abandonados” y guiarlos hacia dónde tienen que dirigirse.
Así lo aseguró la presidenta Claudia Sheinbaum, quien también reiteró las aportaciones que dan al crecimiento de Estados Unidos, dado que 7 de cada 10 trabajadores del campo son de origen mexicano, lo cual es importante no sólo recordarlo al gobierno de Donald Trump, sino que lo sepan los ciudadanos estadunidenses, también.