Juan Carlos Ortega
MÉXICO, DF, 15 de octubre (apro).- Nacer indígena, en México, es prácticamente una condena a la pobreza. Nacer en el sureste lo agrava, y es todavía peor si se nace mujer.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí
Juan Carlos Ortega
MÉXICO, DF, 15 de octubre (apro).- Nacer indígena, en México, es prácticamente una condena a la pobreza. Nacer en el sureste lo agrava, y es todavía peor si se nace mujer.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí