MÉXICO, D.F., 5 de abril (apro).- Pese a que la empresa Tokio Electric Power Co (TEPCO) reportó altos niveles de radicación de yodo en muestras de agua marina –7.5 millones más del límite legal– el gobierno de Japón, defendió su decisión de tirar agua contaminada de la planta en el Océano Pacífico.
En rueda de prensa, el ministro de Asuntos Exteriores, Takeaki Matsumoto, afirmó que al verter agua contaminada al mar no se viola ninguna ley internacional, además de que no representa mayor riesgo para la salud humana.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí