EUROPAFOCUS “Los jueces son los más reacios” a reconocer el feminicidio: experta europea

BRUSELAS (apro).- Cristina Fabré es jefa de unidad del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Instituto Europeo de la Igualdad de Género (EIGE, por sus siglas en inglés), una agencia de la Unión Europea (UE) con sede en Vilna, la capital de Lituania, que entró en funciones en 2010.

Fabré estudió ciencias de la educación y luego un doctorado en sociología del género en la Universidad Autónoma de Barcelona. Trabajó en el programa de Nuevas Oportunidades para Mujeres del Fondo Social Europeo para el Instituto Nacional de Empleo de España y fue consultora de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

Carta abierta al movimiento feminista

CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- Queridas todas:

Cuando esta carta comience a circular, ustedes, en compañía de muchos de nosotros, estarán llevando a cabo y habrán concluido ese acto de altísima dignidad que es haberse ausentado de la vida diaria de México. Su acto nos llena a muchos de orgullo, de fuerza, de esperanza. Es una de las acciones no-violentas más hermosas que haya tenido la nación en medio de una de sus épocas más violentas y aterradoras, y bajo uno de sus gobiernos más sordos e indiferentes al sufrimiento. Su ejemplo en el orden de la dignidad es inmenso. No en vano Gandhi decía que ustedes son “la mejor parte de la humanidad”.

Cuando despertó, la persistencia feminicida todavía estaba allí…

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- A treinta años de distancia –desde la instauración del neoliberalismo hasta el inicio de la 4T–, los crímenes de género, hoy sujetos a la mezquindad de una disputa política, continúan sumando día tras día cadáveres de niñas y mujeres al listado luctuoso de la barbarie que carcome las entrañas del país.

Con el fenómeno de las muertas de Juárez inició en México, a instancias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH), el recuento sucesivo de feminicidios y, con ello, la socialización de la impunidad imparable hasta el día de hoy.

Revuelta social de mujeres

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Crece la revuelta social de mujeres contra las violencias que les azotan. Las protestas no son nuevas, pero nunca se había producido una adhesión tan grande a esas causas.

Es un acontecimiento político porque esa revuelta busca cambios en el Estado y en la sociedad para eliminar la violencia estructural contra las mujeres y también para conquistar derechos y las garantías de estos.

CONTRAPLANO “No soy quien crees”: pasión, redes sociales y mentiras

MONTERREY, N.L. (apro).- El entusiasmo de Claire es dolorosamente patético: se enamora, a través de chats de redes sociales, de un hombre joven al que no ha visto en persona. Como mujer madura, vive un éxtasis virtual que experimentan las chicas en la adolescencia.

Inmiscuyéndose, voluntariamente, en una relación incorpórea, se vuelve loca de amor. Prendada de un fantasma, al que cree conocer, comienza a desapegarse de la realidad, mostrándose cada vez más emocionada y feliz con una ilusión que le ha regresado vitalidad a su aburrida existencia.

¿Es ésta la Universidad de la Nación?

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La actual administración de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha desarrollado una intensa campaña en la que la institución es presentada como la Universidad de la Nación. La frase es brillante porque refleja tanto la opinión que los universitarios tienen de sí mismos, como la forma en la que les gustaría ser percibidos. Sin embargo, bajo la insistente campaña, se ocultan contradicciones que corresponden al ámbito universitario y no deben ser endosadas al país.

Una de estas contradicciones la representa la forma en la que han abordado las demandas del movimiento feminista en la UNAM; el proceso en sus inicios y en su desarrollo ha permitido a la opinión pública observar cuál es el significado de la autonomía para los actores del conflicto universitario. Para éstos, autonomía y cumplimiento de su propia legislación no están vinculadas porque la entienden a la manera de la sociedad feudal, como un privilegio de carácter colectivo que les permite, en primer lugar, disfrutar de leyes particulares, y en segundo, cumplirlas o no a su arbitrio. Esta manera de entender la autonomía es resultado de la confusión que existe entre aquellos que no conocen la historia ni el significado de la autonomía.