Tras denunciar abuso sexual en el Ejército, la sargento Adarely sufre ahora el hostigamiento militar

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Desde hace dos meses, la sargento Adarely F.J. duerme en el cuartel de la 36 zona militar en Tapachula, Chiapas, por miedo a que le hagan algo. Meses atrás, notó que la seguían en su camino a la casa que rentaba y en su oficina recibió una amenaza de muerte. Le dijo a su mamá que mejor se quedaría en las instalaciones militares por si un día no la encuentra, sepa que ahí está.

Después de 10 años en el Ejército, la sargento de 30 años se enfrenta a la institución tras ser víctima de acoso y abuso sexual. Luego de denunciar, la vigilancia sobre sus pasos y el hostigamiento sobre sus actividades se han intensificado.



Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí